En nuestro mundo complicado y difícil deberíamos tener cautela con el mensaje fácil, ya que lo evidente será lo bastante difícil de creer. Desde mi punto de vista, lo que Stieglitz nos legó para uso nuestro no fue ni su estilo ni sus imágenes, aunque ambas cosas son inspiradoras. Más bien fue una tradición de fe en nuestra propia visión, fuese cual fuese, y el deseo de utilizarla con la pasión por la verdad más fuerte que poseamos.
Si mantenemos la fe en nuestra visión podremos proteger las antiguas tradiciones fotográficas contra ataques insensatos, al igual que podremos velar para que las imágenes y estilos de los artistas más jóvenes no sean destruidas impunemente.
Henry Holmes Smith, La fotografía en nuestro tiempo: prospecciones para la séptima década (1961), citado por Joan Fontcuberta en Estética fotográfica (Editorial Gustavo Gili)