En marzo de 1933, Hitler ocupó el cargo de canciller de Alemania con el apoyo del parlamento y la aclamación de gran parte de sus compatriotas. Esa misma tarde, una de las protagonistas de En brazos de un extraño celebraba su fiesta de cumpleaños. La mesa estaba preparada para muchos invitados. No acudió nadie.
En brazos de un extraño relata el traslado de niños judíos a Inglaterra durante los meses previos a la Segunda Guerra Mundial. La mayoría de ellos nunca volverían a ver a sus padres.
Norbert Wollheim fue uno de los organizadores de la operación Kindertransport y uno de los supervivientes de Auschwitz. Al referirse a su historia, a su paso por el campo de exterminio, a la vida durante la guerra, Wollheim pronuncia unas palabras reveladoras: La supervivencia es un accidente.
Los testimonios de aquellos niños -hoy abuelos- no eluden las dificultades de adaptación, el rencor hacia los padres que les habían enviado al extranjero, el inmenso dolor sufrido. Como las palabras que cierran el diario de Eva Hayman, escritas el mismo día en que supo que sus padres habían muerto en Auschwitz: Que la felicidad os inunde donde el sufrimiento no pueda alcanzaros. […] Con la luna y las estrellas que mi amor os calme para siempre dondequiera que estéis.
Escucho a Eva Hayman y recuerdo un poema de Paul Celan:
FUGA DE LA MUERTE (traducción de J. A. Valente)
Negra leche del alba la bebemos al atardecer
la bebemos a mediodía y en la mañana y en la noche
bebemos y bebemos
cavamos una tumba en el aire no se yace estrechamente en él
Un hombre habita en la casa juega con las serpientes escribe
escribe al oscurecer en Alemania tus cabellos de oro Margarete
lo escribe y sale de la casa y brillan las estrellas silba a sus
mastines
silba a sus judíos hace cavar una tumba en la tierra
ordena tocad para la danza
Negra leche del alba te bebemos de noche
te bebemos en la mañana y al mediodía te bebemos al atardecer
bebemos y bebemos
Un hombre habita en la casa juega con las serpientes escribe
escribe al oscurecer en Alemania tus cabellos de oro Margarete
tus cabellos de ceniza Sulamita cavamos una tumba en el aire no
se yace estrechamente en él
Grita cavad unos la tierra más profunda y los otros cantad sonad
empuña el hierro en la cintura lo blande sus ojos son azules
cavad unos más hondo con las palas y los otros tocad para la
danza
Negra leche del alba te bebemos de noche
te bebemos al mediodía y la mañana y al atardecer
bebemos y bebemos
un hombre habita en la casa tus cabellos de oro Margarete
tus cabellos de ceniza Sulamita él juega con las serpientes
Grita sonad más dulcemente la muerte la muerte es un maestro
venido de Alemania
grita sonad con más tristeza sombríos violines y subiréis como
humo en el aire
y tendréis una tumba en las nubes no se yace estrechamente allí
Negra leche del alba te bebemos de noche
te bebemos a mediodía la muerte es un maestro venido de
Alemania
te bebemos en la tarde y la mañana bebemos y bebemos
la muerte es un maestro venido de Alemania sus ojos son azules
te hiere con una bala de plomo con precisión te hiere
un hombre habita en la casa tus cabellos de oro Margarete
azuza contra nosotros sus mastines nos sepulta en el aire
juega con las serpientes y sueña la muerte es un maestro venido
de Alemania
tus cabellos de oro Margarete
tus cabellos de ceniza Sulamita.
Mark Jonathan Harris: En brazos de un extraño
Paul Celan: Obras Completas (Traducido por J. L. Reina Palazón – Ed. Trotta)