El mundo se encuentra al borde de una frontera terrible
y el destino deberá tomar decisiones colosales.
En la torre del olvido eterno
suena la hora final del capitalismo.
El discípulo preferido de Lenin, Nikolái Ivánovich Bujarin, desde la cárcel, el 12 de julio de 1937, antes de morir ejecutado por orden de Stalin.
Leído en las memorias de Anna Lárina: Lo que no puedo olvidar (Galaxia Gutenberg – Círculo de Lectores)