La producción de una imagen perfecta por medio de la fotografía es un arte; la producción de un negativo técnicamente perfecto es una ciencia.
Hurter y Driffield, 1890, citados por Beaumont Newhall en Historia de la fotografía (Editorial Gustavo Gili)
Y ahora viene la pregunta obligada ¿prefieres arte o ciencia?
Empleando una terminología que no comprenderán los menores «de cierta edad», yo era de letras mixtas… o sea que que no le hago ascos a nada, aunque uno tiene sus querencias… ¿y tú?
Ahora bien, otro tema diferente es reducir el papel del artista a la de manipulador de aparatos tecnológicos… ahí creo que hay más ciencia que arte… es un tema que da para mucho 😉
yo era de ciencia puras 😉 , pero creo como antonio, una cosa es manipular aparatos y otra bién diferente, ser artista. Que seria de nuestra vida sin improvisación?
Pues yo soy de letras puras así que lo tengo clarísimo. No necesito la perfección técnica para nada, lo bueno es transmitir. Eso sí, adoro el trabajo de gente como Edgerton o Adam Fuss 🙂
Letras puras… eso suena a griego y latín… upss!!! Y de ciencias puras mejor no hablar para no meter la pata 😉
Sobre Adam Fuss escribí este artículo en FronteraD. Yo creo que tiene bastante que ver con lo que estamos hablando…
Me ha gustado mucho el artículo, te lo robo, ¿vale? ¿De dónde sacaste las citas? Son muy buenas. ¡Pena que me perdí esa exposición!
Un saludo
Me alegra que te guste. Las citas son de la expo Cazadores de Sombras en el Victoria & Albert Museum de Londres.
La expo de Adam Fuss era absolutamente increíble… y solía estar prácticamente vacía 😦 Supongo que eso quiere decir algo…
¿Qué crees que quiere decir, que a la gente se la suda o que no hicieron suficiente publicidad?
En la fotografía, como en casi todo, funcionamos por el nombre… el nombre es el reclamo… si le conocemos y es un mito viviente, vamos todos. En la fotografía, como en todo, son más los que sintonizan los cuarenta principales y los que tararean la canción del verano -sobre todo si suena en los escenarios de PhotoEspaña- que los que escuchan Radio 3. Con los talleres de fotografía pasa lo mismo.
Si al fotógrafo le conocen cuatro, van solo cuatro. Por hablar de lo que me toca, yo creo que las escuelas de fotografía tenemos una responsabilidad en todo esto, tenemos que abrir las expectativas de los alumnos y animarles a participar de experiencias como la expo de Adam Fuss. Porque experiencias así ensanchan nuestra percepción y nos acercan a algo más profundo que la superficialidad al uso. Una vez que das el paso y conoces obras como la de Fuss, lo que te la suda son otras obras que están en el Top 40 de museos y galerías…
Hay modas como en todo, en fotografía, en arte y en música. El otro día comentaba con un amigo que si ahora hiciesen una exposición de Velazquez en el Padro, la gente iría en masa, aunque nunc se hayan preocupado de acercarse a ver las pinturas que ya hay allí.